«Este año, la producción de este dulce tan tradicional ha subido un 10%, así mismo se generan nuevas marcas de turrones representando un nicho de mercado con crecimiento».
Octubre no solo trae devoción y fe hacia el Señor de los Milagros, sino que también le da un empujón a varias industrias en el país. Un ejemplo claro es la industria textil, donde la confección de los famosos hábitos morados, tan representativos de esta tradición, que ha crecido un 12% en el año 2023, y se espera que este sector supere su producción este año. Todo ello debido a la alta demanda de túnicas y cordones blancos, que los fieles lucen durante las procesiones.
La industria alimentaria tampoco se queda atrás, y en octubre se dispara gracias al clásico turrón. Este año, la producción de este dulce tan tradicional ha subido un 10%. Asimismo, se generan nuevas marcas de turrones, representando un nicho de mercado en crecimiento. Todo esto refleja el cariño de los peruanos por mantener vivas sus tradiciones culinarias.
Tampoco podemos olvidar el efecto que octubre tiene en la industria ferretera, donde la demanda de materiales de construcción y estructuras temporales se incrementa. Durante esta festividad, la producción de acero y otros productos aumentó un 8% en 2023, impulsada por la necesidad de acondicionar calles e iglesias para recibir a los miles de fieles que participan en las celebraciones.
En pocas palabras, la festividad del Señor de los Milagros no solo mueve corazones, sino también la economía, dándole un impulso a varias industrias en Perú y aportando al crecimiento de la economía nacional.